El adiós del culé más grande. El adiós de Pep

Ayer jueves leí una reflexión de un gran analista del fútbol que encajaba a la perfección con lo que yo pensaba en esos momentos. "La lucha entre Madrid y Barça ha sido tan agresiva y tan competitiva que han terminado por devorarse ellos mismos". Curiosa paradoja es que hayan sido Leo Messi y Cristiano Ronaldo los que hayan fallado en el momento decisivo de la temporada. El fútbol tiene estos momentos tan crueles. A los madridistas les queda el consuelo de una Liga que van a conseguir merecidísimamente. A los culés ni la Copa del Rey les dará consuelo después de la noticia de hoy (noticia que habrá alegrado enormemente a los primeros).

Un 30 de agosto de 2008 el Numancia le ganó 1-0 al Barça. Una semana después, no pasaba del empate a 1 ante el Rácing en el Camp Nou. Muchas voces comenzaban a criticar la falta de experiencia de aquel hombre de la casa que había tomado las riendas de un equipo viciado y pedían poco menos que su destitución. Pero Pep Guardiola siguió fiel a su estilo. Los títulos sólo llegarán si jugamos bonito y tenemos la pelota. Llegó el triplete en 2009 que meses después se convirtió en el sextete, único equipo en la historia en lograrlo. Y así ha cosechado títulos y elogios hasta el día de hoy. El Barça de Pep Guardiola ha ganado, hasta la fecha 13 de 18 títulos posibles (3 Ligas, 1 Copa del Rey, 3 SuperCopas de España, 2 Champions League, 2 SuperCopas de Europa, 2 Mundial de Clubs) que pueden ser 14 de 19 si el Barça conquista una nueva Copa del Rey en el último partido con Pep en el banquillo.

El Barça de Pep ha sido el mejor equipo que yo haya visto en mis casi 20 años que recuerdo del fútbol. Me ha enamorado su juego. No esconderé que, desde que era jugador, levantó mi admiración por la manera de percibir y sentir el fútbol. Una admiración que continúa ahora que es entrenador. Me encanta su filosofía. En varias ocasiones ha estado a punto de lograr su sueño de jugar con 11 canteranos.

¿Cuáles son las razones de su marcha? Pep ha hablado de desgaste (sólo hay que ver fotos de hace 4 años y las actuales para darse cuenta de ello). Un desgaste en el que su alter ego en el banquillo merengue tiene buena culpa de ello. El desgaste que Pep ha sufrido en el banquillo teniendo en frente a Mourinho ha sido el doble que el que tuvo las 2 primeras temporadas. Pero también el haberlo logrado todo con el equipo. Es imposible superar el éxito de un equipo que logró todos los títulos posibles en la primera temporada; a partir de ahí sólo se podía ir para abajo. Bien es cierto que, en estos cuatro años, es el primero en el que no va a conquistar ni Liga ni Champions y que puede parecer cobarde su marcha, pero estoy seguro de que Pep ya tenía decidido su adiós incluso antes del sorteo de cuartos de final de la Champions. Tampoco es lo mismo acabar con vacas sagradas como Ronaldinho, Deco, Etoo o Ibrahimovic que hacerlo con gente como Alves o Piqué, o ver como tienes que dejar en el banquillo a gente como Xavi que empiezan a iniciar el ocaso de su carrera. Ni lidiar con un presidente que, a pesar de ofrecerle un cheque en blanco, no ha dejado de criticar a su predecesor. Es cuestión de feeling, como diría él.

De lo que no queda duda es que hoy el barcelonismo ha perdido a su principal líder. Como dijo Messi, "Pep es mucho más importante que yo en este equipo". Se queda al frente su escudero Tito Vilanova, pero ya no será lo mismo sin Pep. El día 25 de mayo se cerrará el mejor ciclo de la historia del Barça. Un Barça que siempre será recordado por su juego, al igual que el Brasil de Pelé, que el Milán de Sacchi o que el Ajax de los 90. Un Barça que será "el Barça de Pep".

"Si perdéis, seréis los mejores. Si ganáis, seréis eternos". Tú ya has conseguido serlo con el equipo de tus amores. #GraciasPep